Un famoso paseo marítimo que ofrece vistas espectaculares del Mediterráneo y es perfecto para caminar o andar en bicicleta.
El corazón histórico de Niza, lleno de encantadoras calles estrechas, coloridos mercados y restaurantes tradicionales.
Conocido por su mercado de flores y productos frescos, es un lugar vibrante lleno de vida y color.
Una impresionante catedral en el Vieille Ville que destaca por su arquitectura barroca.
Las ruinas de un antiguo castillo en una colina que ofrece vistas panorámicas de Niza y la bahía.
El puerto de Niza, donde se pueden ver yates de lujo y disfrutar de la atmósfera marítima.
Una de las plazas más grandes de Niza, rodeada de edificios con fachadas pintadas en tonos amarillos y ocres.
Dedicado al artista Henri Matisse, alberga una de las mayores colecciones de sus obras en el mundo.
Centrado en la obra bíblica del artista, es un espacio de arte y tranquilidad.
Un parque botánico y zoológico que ofrece una gran diversidad de plantas y animales, ideal para familias.
Una fortaleza histórica con vistas impresionantes de la ciudad y la costa[^1^][2].