El Monasterio Trúc Lâm suele abrir sus puertas de 9:00 a 16:00 todos los días. Para llegar, puedes tomar el teleférico desde la estación de Robin Hill, lo cual es una experiencia preciosa, o bien un taxi o moto hasta la entrada principal.

¡Buenas noticias! La entrada al Monasterio Trúc Lâm es totalmente gratuita. Solo tendrás que pagar el teleférico si decides usarlo para subir, que tiene un costo aproximado de 100.000 VND ida y vuelta por persona.

Te recomiendo dedicar entre 1.5 y 2 horas para explorar el monasterio con calma. Así tendrás tiempo suficiente para admirar la arquitectura, pasear por los jardines y disfrutar de la tranquilidad del lugar sin prisas.

El Monasterio Trúc Lâm es uno de los monasterios más grandes y venerados de la secta Trúc Lâm Yên Tử del budismo Zen en Vietnam. Es un importante centro de peregrinación y meditación, establecido con el objetivo de revivir el budismo Zen en el país. Su creación en 1994 ha sido clave para la restauración y enseñanza de estas prácticas en la región de Da Lat y más al sur de Vietnam.

El mejor momento para visitar el monasterio es por la mañana temprano, justo después de la apertura, o a media tarde para evitar las multitudes y disfrutar de una atmósfera más serena. En cuanto a la época del año, los meses secos de noviembre a abril son ideales para un clima agradable.

Sí, el monasterio ha sido diseñado con cierta accesibilidad. El teleférico es accesible y gran parte del área principal del monasterio y sus jardines son relativamente planos, lo que facilita el acceso para personas con movilidad reducida o en silla de ruedas.

Muy cerca del monasterio, puedes encontrar el impresionante lago Tuyen Lam, perfecto para un paseo en barco o simplemente para disfrutar del paisaje. También puedes visitar el teleférico de Dalat (si no lo usaste para subir) y el Parque de las Flores de Dalat, a poca distancia en coche, para complementar tu día.

Claro, aquí van algunos: viste con modestia en señal de respeto (hombros y rodillas cubiertos), mantén la voz baja para respetar la atmósfera de tranquilidad, y lleva calzado cómodo para caminar por los jardines. ¡Y no olvides tu cámara para capturar la belleza del lugar!