Los Jardines de la Fuente (Jardins de la Fontaine) están abiertos al público todos los días del año, desde las 7:30 de la mañana hasta el anochecer. No hay restricciones de acceso y puedes llegar a pie desde el centro de Nimes en pocos minutos. Es un paseo muy agradable.

¡Excelentes noticias! La entrada a los Jardines de la Fuente es completamente gratuita, lo que lo convierte en un destino perfecto para disfrutar sin preocuparse por el presupuesto. Puedes pasear libremente y admirar su belleza sin ningún coste.

Para disfrutar plenamente de los Jardines de la Fuente, te recomendamos dedicar al menos entre 1 y 2 horas. Esto te permitirá pasear por sus senderos, admirar las estatuas, fuentes y subir al Monte Cavalier para disfrutar de las vistas panorámicas. Si quieres relajarte, puedes extender tu visita un poco más.

Los Jardines de la Fuente tienen una rica historia, siendo uno de los primeros jardines públicos de Europa, creados en el siglo XVIII sobre un yacimiento romano. En este lugar se encuentran vestigios como el Templo de Diana y la Tour Magne, destacando la profunda conexión de Nimes con su pasado. Es un verdadero testimonio de la genialidad romana y la elegancia francesa.

La primavera y el otoño son épocas magníficas para visitar, con temperaturas agradables y una exuberante vegetación. Por la mañana temprano o al final de la tarde son los mejores momentos del día, ya que evitarás las multitudes y la luz es perfecta para las fotografías. Además, el ambiente es más tranquilo y relajado.

Parte de los Jardines de la Fuente son accesibles para personas con movilidad reducida, especialmente la zona inferior y los senderos principales. Sin embargo, algunas áreas, como la subida a la Tour Magne, pueden presentar escaleras o terrenos irregulares. Te recomendamos consultar un mapa detallado en la entrada para planificar tu ruta. Para más información, puedes visitar la web oficial de Turismo de Nimes sobre los Jardines.

Muy cerca de los Jardines podrás encontrar la impresionante Arena de Nimes y la Maison Carrée, ambos magníficos ejemplos de arquitectura romana que no te puedes perder. Te recomiendo combinar la visita y dedicar un día entero a explorar el legado romano de Nimes.

Te recomiendo llevar calzado cómodo para caminar, especialmente si planeas subir a la Tour Magne. No olvides tu cámara para capturar la belleza del lugar y, si el clima lo permite, un picnic para disfrutar en alguna de sus zonas de césped. Para una experiencia más completa, considera nuestra audioguía para descubrir todos sus secretos y anécdotas.