La Catedral de San Bartolomé generalmente está abierta al público de lunes a sábado de 9:00 a 18:00 y los domingos de 13:00 a 18:00. Puedes visitarla libremente o como parte de un recorrido guiado. Te recomendamos verificar los horarios actualizados en su sitio web oficial antes de tu visita: dom-frankfurt.de.

La entrada a la Catedral de San Bartolomé es gratuita para la nave principal. Sin embargo, si deseas subir a la torre para disfrutar de las vistas panorámicas de Fráncfort, hay una pequeña tarifa de entrada que suele rondar los 3-4 euros. Los precios exactos y posibles descuentos los encontrarás en la taquilla o en su web.

Para una visita completa de la Catedral de San Bartolomé, incluyendo la nave principal, el museo y, si decides subir, la torre, te recomendamos reservar entre 1 y 2 horas. Si solo te interesa la arquitectura y el interior de la nave, con 45 minutos será suficiente.

La Catedral de San Bartolomé, conocida también como la 'Kaiserdom' o Catedral Imperial, es de suma importancia histórica. Fue el lugar de las elecciones y coronaciones de los emperadores del Sacro Imperio Romano Germánico, lo que la convierte en un símbolo fundamental de la historia alemana. Su historia se remonta al siglo XIII.

Para evitar las mayores aglomeraciones, te sugerimos visitar la Catedral temprano por la mañana, justo después de la apertura, o a última hora de la tarde. En cuanto al mejor momento del año, la primavera y el otoño ofrecen un clima agradable y menos turistas que el pico del verano. Evita los domingos por la mañana, ya que hay servicios religiosos.

La nave principal de la Catedral de San Bartolomé es accesible para personas con movilidad reducida y sillas de ruedas. Sin embargo, el acceso a la torre para subir sus estrechas escaleras no es apto para sillas de ruedas. Para información detallada sobre accesibilidad o asistencia especial, puedes contactarles a través de su sitio web o email.

Estás en el corazón del centro histórico de Fráncfort, ¡así que hay mucho cerca! A pocos pasos se encuentra el Römerberg, la plaza histórica con sus casas de entramado de madera, y el Museo de Historia de Fráncfort. También puedes cruzar el río Meno por el Eiserner Steg (Puente de Hierro) para explorar el barrio de Sachsenhausen con sus sidrerías. El Museo Städel está a poca distancia andando también.

¡Claro! Te recomiendo llevar calzado cómodo si planeas subir a la torre, ya que son muchos escalones. Considera la posibilidad de descargar una audioguía o unirte a un tour para entender mejor la rica historia del lugar. Y, por supuesto, no olvides tu cámara para capturar la impresionante arquitectura gótica y las vistas desde la torre. ¡Disfruta tu visita!