Una cisterna subterránea del siglo XVI que solía almacenar agua, famosa por su impresionante arquitectura y su atmósfera misteriosa.
El casco antiguo de la ciudad, con estrechas callejuelas, mercados vibrantes y arquitectura tradicional marroquí.
Una antigua fortaleza portuguesa que ofrece vistas panorámicas de la ciudad y la costa.
Una extensa playa de arena fina ideal para relajarse, nadar y practicar deportes acuáticos.
Un faro histórico que se alza sobre un acantilado, ofreciendo vistas espectaculares del océano Atlántico.
Un teatro cultural en el centro de El Jadida que alberga una variedad de actuaciones artísticas y eventos.
Una iglesia católica portuguesa del siglo XVI con una arquitectura impresionante y un interior decorado con frescos.
Un puerto tradicional que ha sido el corazón de la actividad comercial y pesquera de la ciudad durante siglos.
Un parque público con jardines bien cuidados, áreas de juego para niños y espacios para relajarse.
Un lujoso complejo frente al mar que ofrece una variedad de actividades recreativas y de ocio, incluyendo golf, spa y casino.