Construida en el siglo XVI, esta iglesia es un testimonio del sincretismo entre la fe católica y las creencias mayas locales. Es famosa por su arquitectura colonial y su ambiente tranquilo.
Maximón es una deidad venerada en la región, y la cofradía es el lugar donde se le rinde culto. Los visitantes pueden experimentar rituales tradicionales y aprender sobre las creencias locales.
Dedicado a la preservación y promoción del arte textil tradicional Tz’utujil, este museo ofrece a los visitantes una visión detallada de las técnicas de tejido y la importancia cultural de los textiles.
Ofrece vistas panorámicas impresionantes del Lago Atitlán y los volcanes circundantes, ideal para los amantes de la naturaleza y la fotografía.
Un vibrante mercado donde se puede encontrar una variedad de productos locales, desde frutas y verduras hasta artesanías y textiles tradicionales.
Un monumento dedicado a la memoria de las víctimas del conflicto armado en Guatemala, conmemorando la masacre de 1990. Es un lugar para la reflexión y el recuerdo.