Un laberinto de calles empedradas, casas de piedra tradicionales y pequeños comercios con productos locales. Ideal para pasear y empaparse del ambiente.
La iglesia parroquial de Arájova, con una arquitectura y un campanario distintivos. Ofrece buenas vistas del pueblo y sus alrededores.
Un elemento icónico en el centro del pueblo, a menudo un punto de encuentro y un buen lugar para empezar a explorar.
Exhibe la historia, la cultura y las tradiciones de la región, incluyendo herramientas antiguas, trajes típicos y objetos de la vida rural.
El corazón de la actividad social, rodeada de cafés, tabernas y tiendas. Perfecta para saborear la gastronomía local y observar la vida local.
Aunque no está en el mismo pueblo, es el principal atractivo invernal y se encuentra muy cerca. Ofrece pistas para esquí y snowboard y es una de las más grandes de Grecia.
Unas pequeñas pero pintorescas cascadas en las afueras de Arájova, accesibles mediante una caminata corta. Especialmente bonitas en primavera.
Un impresionante monasterio bizantino, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, situado a poca distancia de Arájova. Famoso por sus mosaicos y su arquitectura.
Aunque no está directamente en Arájova, se encuentra a muy poca distancia y es un destino imprescindible. Hogar del antiguo Oráculo de Delfos y un centro religioso de la antigua Grecia.
Arájova se encuentra a los pies de este parque, ofreciendo numerosas oportunidades para el senderismo, el ciclismo de montaña y la exploración de la naturaleza en un entorno montañoso.