Una catedral gótica conocida por su impresionante arquitectura y vidrieras.
El icónico edificio que una vez sirvió como puerta principal y prisión, ahora alberga un museo.
Un palacio fortificado que refleja la historia de Perpiñán como capital del Reino de Mallorca.
El antiguo cementerio y claustro, uno de los más grandes de Francia.
Una antigua puerta de la ciudad y fortaleza que es un símbolo de Perpiñán.
Un palacete que muestra la opulencia de la burguesía de Perpiñán en el siglo XIX.
Un museo de arte dedicado a obras desde el siglo XIV hasta la actualidad.
Un museo que ofrece una mirada a la biodiversidad y geología de la región.
Una plaza histórica con la Loge de Mer y el Ayuntamiento, centro de la vida pública de la ciudad.
Una iglesia que destaca por su mezcla de estilos arquitectónicos y su rica historia.