El corazón histórico de La Rochelle, famoso por sus dos torres guardianas y su ambiente vibrante.
Las icónicas torres de La Rochelle que ofrecen vistas panorámicas y una rica historia marítima.
Uno de los acuarios más grandes de Europa, hogar de una vasta colección de vida marina.
Un museo que celebra la historia naval de la ciudad con barcos históricos y exposiciones interactivas.
La torre más alta de La Rochelle, que ofrece impresionantes vistas de la ciudad y el mar.
Una torre histórica que una vez sirvió como parte de las defensas de la ciudad.
Otra torre defensiva que forma parte del emblemático paisaje del puerto.
Un mercado bullicioso donde se pueden encontrar productos frescos y especialidades locales.
Un museo con colecciones de zoología, etnografía y geología.
Un parque tranquilo ideal para pasear y disfrutar de la naturaleza en la ciudad.