Una fortaleza árabe del siglo XII, uno de los pocos ejemplos de arquitectura almohade que quedan en la Península Ibérica.
Uno de los edificios religiosos más bonitos de la provincia, preside el Barrio de San Miguel.
Conocida por su mezcla de estilos gótico, barroco y neoclásico, es un monumento emblemático de la ciudad.
Un monasterio cartujo con una rica historia y arquitectura impresionante.
Un palacio barroco que destaca por su arquitectura y su importancia histórica en la ciudad.