Una playa virgen y tranquila, ideal para relajarse y disfrutar del sol y el mar. Sus arrecifes de coral la hacen perfecta para el snorkel y el buceo, siendo uno de los pocos arrecifes rocosos del Pacífico Oriental. Es hogar de una rica biodiversidad marina.
El arrecife de coral rocoso más grande del Pacífico Oriental. Ofrece excelentes oportunidades para el buceo y el snorkel, con una gran variedad de peces tropicales, corales y otras especies marinas. Es un área protegida de gran importancia ecológica.
Un ecosistema marino y costero que abarca la playa y los arrecifes, diseñado para la conservación de su rica biodiversidad. Ofrece actividades ecoturísticas y educativas.
El antiguo faro es un ícono histórico y ofrece vistas panorámicas del océano. El nuevo faro sigue en funcionamiento y es un punto de referencia importante para la navegación en la zona.
Los manglares circundantes a la playa ofrecen un ecosistema único para el avistamiento de aves y la exploración en kayak o lancha. Son importantes viveros para muchas especies marinas.
Un pequeño pueblo de pescadores con un ambiente auténtico y tranquilo. Ofrece la oportunidad de conocer la vida local y disfrutar de la gastronomía salvadoreña, especialmente mariscos frescos.
Una experiencia auténtica que permite a los visitantes acompañar a los pescadores locales en sus faenas diarias, aprendiendo sobre sus técnicas ancestrales y la importancia de la pesca sostenible en la comunidad.