Una de las playas más largas de la Riviera Albanesa, con arenas blancas y aguas cristalinas, ideal para nadar y relajarse.
Un antiguo castillo situado en una colina con vistas espectaculares del mar y los alrededores. Data del período bizantino y ha sido renovado en épocas posteriores.
Preciosas cascadas situadas cerca del pueblo, rodeadas de vegetación natural. Un lugar perfecto para disfrutar de la naturaleza y hacer fotografías.
Antiguo mesón del período otomano que muestra la arquitectura y vida cotidiana de esa época. Algunos de estos mesones se han convertido en museos locales.
Una iglesia ortodoxa situada en Borsh, conocida por su arquitectura tradicional y frescos antiguos.