Bari Vecchia, al ser el casco antiguo de la ciudad, está abierto las 24 horas del día. Puedes acceder a pie desde cualquier punto cercano del centro de Bari. La mayoría de las calles son peatonales o de tráfico muy limitado, lo que facilita un paseo tranquilo en cualquier momento. No hay un horario de apertura o cierre oficial para el barrio en sí, aunque las iglesias y comercios tienen sus propios horarios. Para más información sobre el turismo en Bari, puedes consultar la página de Italia.it: Bari.

¡Para fortuna de tu bolsillo, la visita a Bari Vecchia es completamente gratuita! Es un barrio histórico abierto al público, así que puedes recorrer sus calles sin ningún costo. Algunas atracciones específicas dentro del barrio, como la Basílica de San Nicolás o el Castello Normanno-Svevo, sí pueden tener una tarifa de entrada o pedir una donación voluntaria. Te recomiendo llevar algo de efectivo para pequeñas compras o donaciones en iglesias.

Para una primera exploración relajada y poder empaparte bien de la atmósfera de Bari Vecchia, te recomendaría dedicar al menos medio día, unas 3-4 horas. Esto te dará tiempo suficiente para pasear por sus callejuelas, visitar la Basílica de San Nicolás y la Cattedrale di San Sabino, y quizás disfrutar de un café o una orecchiette fresca. Si eres de los que les gusta profundizar, podrías extenderlo a un día completo para visitar museos o sumergirte más en la vida local.

Bari Vecchia es el auténtico corazón histórico de Bari, un laberinto de callejuelas que cuenta mil años de historia. Ha sido testigo de dominaciones normandas, suabas, angevinas y aragonesas, y su arquitectura refleja esa rica mezcla cultural. Es especialmente importante como centro religioso, albergando la Basílica de San Nicolás, un importante lugar de peregrinación. Sus tradiciones, como la preparación de la pasta orecchiette en las calles, son un testimonio vivo de su herencia. Puedes leer más sobre la historia de Bari en Wikipedia: Bari.

Los meses de primavera (abril-mayo) y principios de otoño (septiembre-octubre) son ideales para visitar Bari Vecchia, ya que el clima es agradable y hay menos aglomeración de turistas que en pleno verano. En cuanto al momento del día, te sugiero ir a primera hora de la mañana para ver el barrio despertar o al final de la tarde para disfrutar del ambiente nocturno, con sus luces y restaurantes animados. Evita las horas centrales del día en verano por el calor intenso.

La accesibilidad en Bari Vecchia puede ser un desafío. Muchas de sus calles son estrechas, empedradas e irregulares, con escalones en algunos puntos, lo que puede dificultar el tránsito con silla de ruedas. Sin embargo, las vías principales que llevan a la Basílica de San Nicolás o a la Catedral son más transitables. Te recomendaría buscar rutas específicas o preguntar al llegar. La paciencia y, si es posible, ayuda, serán clave para explorar las zonas más accesibles. Algunas zonas turísticas, como el paseo marítimo adyacente, son completamente accesibles.

¡Muchísimas! Justo al lado de Bari Vecchia tienes el imponente Castello Normanno-Svevo di Bari, una fortaleza medieval impresionante. También puedes pasear por el Lungomare Nazario Sauro, el paseo marítimo de Bari, y disfrutar de las vistas. Si te interesa el arte, el Pinacoteca Corrado Giaquinto está a poca distancia. Y, por supuesto, no te olvides de probar la gastronomía local en los alrededores o en el moderno barrio de Murat, con sus elegantes tiendas.

¡Claro! Primero, lleva calzado cómodo, ya que las calles empedradas pueden ser resbaladizas y desiguales. No tengas miedo de perderte; es parte de la magia y siempre encontrarás una plaza o una iglesia interesante. Prueba las orecchiette hechas a mano por las 'nonnas' en la Via Arco Basso, es una experiencia única. Ten precaución con tus objetos de valor en las zonas concurridas y, sobre todo, relájate y disfruta del ambiente auténtico de este lugar tan especial.