El acceso a El Golfo y al Charco de los Clicos es libre y está disponible las 24 horas del día. Recomendamos visitarlo durante las horas de luz para apreciar su belleza. Para llegar, puedes seguir la carretera LZ-703 hasta el pueblo de El Golfo, donde encontrarás señalización al parking y un sendero al mirador. Te dejamos aquí un enlace a la ubicación en Google Maps.

¡No, es completamente gratis! No hay ninguna tarifa de entrada para acceder al mirador de El Golfo y al Charco de los Clicos. Es un espectáculo natural que puedes disfrutar sin coste alguno para el bolsillo.

Con unos 30 a 60 minutos es suficiente para disfrutar del mirador, sacar fotos y empaparte del paisaje. Si quieres explorar el pueblo de El Golfo y comer algo, entonces planifica un poco más de tiempo para disfrutar de los restaurantes de pescado fresco.

El Charco de los Clicos es especial por su color verde intenso, causado por las algas que habitan en sus aguas y los minerales volcánicos. Está situado en el cráter de un antiguo volcán y fue formado por la erosión marina. Es un testimonio impresionante de la actividad volcánica de Lanzarote y de cómo la naturaleza se abre camino en los entornos más extraordinarios.

El mejor momento para visitar es al atardecer, ya que los colores de las rocas y el propio lago se intensifican, creando un espectáculo visual inigualable con las últimas luces del sol. En cuanto a la época del año, cualquier momento es bueno debido al clima templado de Lanzarote, aunque evita los meses de temporada alta si prefieres menos aglomeraciones.

Sí, el sendero que lleva al mirador principal está adaptado para sillas de ruedas y personas con movilidad reducida, lo que permite disfrutar de las vistas sin dificultad. El acceso es bastante cómodo y hay aparcamiento cercano habilitado.

¡Por supuesto! Muy cerca tienes las Los Hervideros, una formación rocosa donde el mar rompe con fuerza en cuevas volcánicas, creando un espectáculo impresionante. También las Salinas de Janubio, unas salinas espectaculares que ofrecen paisajes únicos, especialmente al atardecer.

Lleva calzado cómodo, ya que aunque el sendero es fácil, caminarás un poco. No olvides tu cámara para capturar los colores únicos del paisaje. Si vas al atardecer, no te arrepentirás. Y si puedes, quédate a disfrutar de una cena de pescado fresco en alguno de los restaurantes del pueblo de El Golfo, ¡es una delicia local!