Impresionante estatua del conquistador situada frente a la Iglesia de San Martín.
La Estatua Ecuestre de Francisco Pizarro se encuentra al aire libre en la Plaza Mayor de Trujillo, lo que significa que puedes visitarla en cualquier momento del día o de la noche, 24/7. No se requiere ninguna entrada ni hay horarios de cierre, ya que es un monumento público. Es de libre acceso para todo el mundo.
¡Buenas noticias! Visitar la Estatua Ecuestre de Francisco Pizarro es totalmente gratuito. Al ser un monumento público ubicado en la céntrica Plaza Mayor, no hay tarifas de entrada ni ningún tipo de coste asociado para poder admirarla.
Para ver la Estatua Ecuestre de Francisco Pizarro y tomar algunas fotos, normalmente con 10 a 15 minutos es suficiente. Puedes admirar los detalles de la obra, leer la posible información que haya alrededor y capturar las imágenes deseadas. Si te apetece sentarte en la plaza y disfrutar del ambiente, la visita puede extenderse un poco más.
La Estatua Ecuestre de Francisco Pizarro rinde homenaje al famoso conquistador de Perú, quien nació en Trujillo. Aunque su figura es controvertida, la estatua es un recordatorio de la conexión de la ciudad con uno de sus personajes históricos más influyentes y del papel de España en la conquista de América. La obra es del escultor estadounidense Charles Rumsey y fue donada a la ciudad por la esposa de un banquero de Nueva York.
Para disfrutar la estatua con menos gente y una luz fabulosa para fotos, te recomiendo visitarla a primera hora de la mañana o al atardecer. En esas horas, la luz es más suave y las sombras son más dramáticas. Trujillo recibe bastantes visitantes, especialmente en fines de semana o puentes, así que fuera de esos periodos o en temporada baja (otoño-invierno) también encontrarás menos aglomeraciones.
Sí, la Estatua Ecuestre de Francisco Pizarro está ubicada en la Plaza Mayor de Trujillo, que es una zona urbana mayormente llana y pavimentada. Por lo tanto, la zona es accesible para personas en silla de ruedas o con movilidad reducida. Puedes acercarte sin problema para admirarla de cerca.
Una vez que estés en la Plaza Mayor, estás en el corazón de Trujillo, así que tienes muchísimas opciones a un paso. No te pierdas el Palacio de los Duques de San Carlos, la Iglesia de Santa María la Mayor, o sube al Castillo de Trujillo para unas vistas espectaculares. Toda la zona está llena de palacios y casas señoriales dignas de admirar.
¡Claro que sí! Mi mejor consejo es que, además de ver la estatua, te tomes tu tiempo para pasear por toda la Plaza Mayor, que es una de las más bonitas de España. Siéntate en alguna terraza para tomar algo y empápate del ambiente. Te recomiendo usar calzado cómodo para explorar el casco histórico y, si viajas en verano, lleva agua y protección solar, ya que en Extremadura el calor aprieta. No olvides tu cámara, ¡las fotos serán espectaculares!
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