Un viaje fascinante por la historia y secretos de la única villa medieval fortificada de la costa catalana.
Las Murallas de Tossa de Mar son un espacio al aire libre y, como tal, se pueden visitar libremente las 24 horas del día. No es necesario reservar entrada, ya que el acceso es gratuito. Para una experiencia más completa, te recomendamos pasear por el recinto amurallado tanto de día como al anochecer, cuando la iluminación le da un encanto especial. Puedes encontrar información adicional sobre Tossa de Mar en la web de Turismo de Tossa de Mar.
¡No, para nada! El acceso a las Murallas de Tossa de Mar es completamente gratuito. Puedes recorrerlas a tu aire sin coste alguno. Es una de las joyas de la Costa Brava que puedes disfrutar sin preocuparte por el presupuesto.
Para recorrer tranquilamente todo el recinto amurallado, disfrutar de las vistas, tomar fotos y pasear por las calles de la Vila Vella, te recomendamos dedicarle al menos 1-2 horas. Si además quieres visitar el Faro o el Museo Municipal, planifica un poco más de tiempo. La visita es muy agradable y se presta a la calma.
Las Murallas de Tossa de Mar son el único ejemplo de recinto medieval fortificado que se conserva en el litoral catalán. Fueron construidas en el siglo XII y reforzadas en el XIV para proteger a la población de los ataques piratas. Su excelente estado de conservación y su valor histórico-artístico las han convertido en Monumento Histórico Artístico Nacional desde 1931.
La mejor época para visitar es primavera u otoño, cuando el clima es más suave y hay menos aglomeraciones. Si visitas en verano, te sugiero ir a primera hora de la mañana o al atardecer para evitar el calor intenso y las multitudes. Las vistas con la luz del atardecer son espectaculares.
El terreno dentro de la Vila Vella y el acceso a las murallas presenta desniveles, escaleras y calles empedradas, lo que dificulta la accesibilidad para personas con movilidad reducida o carritos de bebé. Si bien algunos tramos son más accesibles, la experiencia completa puede ser un desafío. Te recomendamos consultar con la oficina de turismo local para opciones puntuales o rutas adaptadas.
Dentro del recinto amurallado puedes visitar el Museo Municipal de Tossa de Mar, ubicado en la Casa Falguera, y subir al Faro para disfrutar de vistas panorámicas. Justo debajo de las murallas tienes la hermosa Cala Codolar y la Platja Gran. Los alrededores ofrecen numerosas calas, el centro histórico de Tossa con sus tiendas y restaurantes, y paseos en barco por la costa.
Te recomiendo llevar calzado cómodo, ya que hay empedrados y algunas pendientes. Si vas en verano, no olvides protección solar y agua. Aprovecha para perderte por las callejuelas estrechas de la Vila Vella, descubrir sus rincones y disfrutar de la gastronomía local en alguno de sus encantadores restaurantes. Y por supuesto, ¡no olvides tu cámara para capturar las impresionantes vistas!
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