Descubre la historia y los secretos del icónico Castillo de Monsanto, una fortaleza medieval enclavada en la 'aldea más portuguesa de Portugal'.
El Castillo de Monsanto es de acceso libre y está abierto las 24 horas del día, los 7 días de la semana, ya que es una ruina histórica sin barreras de entrada. Para llegar, normalmente se sube a pie desde el pueblo de Monsanto, un camino empedrado que ofrece vistas espectaculares. La subida puede tomar entre 15 y 30 minutos, dependiendo del ritmo.
¡Buenas noticias! La entrada al Castillo de Monsanto es completamente gratuita. Puedes explorar el sitio, sus ruinas y disfrutar de las vistas sin coste alguno. Es una de esas joyas escondidas que mantienen su autenticidad sin tarifas de acceso.
Para disfrutar plenamente del Castillo de Monsanto y sus vistas, te recomiendo dedicar entre 1 y 2 horas. Si incluyes la subida desde el pueblo y un paseo tranquilo por las calles de Monsanto, que es un espectáculo en sí mismo, la visita completa podría extenderse a medio día. No olvides parar en el camino para tomar fotos.
El Castillo de Monsanto es de vital importancia histórica, con orígenes que se remontan a la época romana, aunque la estructura actual es principalmente medieval. Fue un bastión estratégico durante la Reconquista, defendiendo la frontera portuguesa de incursiones. Sus ruinas nos cuentan la historia de siglos de batallas y de la vida de quienes habitaron este 'pueblo más portugués de Portugal'.
El mejor momento para visitar el Castillo de Monsanto es durante la primavera (abril-mayo) o el otoño (septiembre-octubre), cuando el clima es más templado y hay menos aglomeración de turistas. A primera hora de la mañana o al atardecer, la luz es ideal para la fotografía y las temperaturas son más agradables. Evita las horas centrales del día en verano por el calor intenso.
Lamentablemente, el Castillo de Monsanto, debido a su ubicación en la cima de una colina rocosa y su terreno irregular, no es accesible para personas con movilidad reducida o sillas de ruedas. El camino hasta el castillo es empedrado y con desniveles, lo que dificulta el acceso. No hay infraestructura adaptada para ello.
Monsanto en sí mismo es una atracción imperdible, conocido como 'el pueblo más portugués de Portugal', con sus casas incrustadas entre rocas. Cerca, puedes visitar la Torre de Lucano, la Capela de São Miguel, y explorar las 'ruas medievais'. Un poco más lejos, pero dentro de la región, se encuentra la hermosa Aldeia Histórica de Idanha-a-Velha con su pasado romano y visigodo, y la Serra da Estrela, ideal para amantes de la naturaleza.
¡Claro! Te recomiendo llevar calzado cómodo y resistente, ya que el terreno es irregular. No olvides agua, especialmente si visitas en verano. Una cámara es imprescindible para capturar las vistas panorámicas. Planea tu visita para disfrutar de la puesta de sol desde el castillo si el tiempo lo permite, es mágico. Y, por supuesto, tómate tu tiempo para explorar el pueblo de Monsanto a fondo, no solo el castillo. ¡Es una experiencia completa!
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