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Para llegar a la Península de Troia, la opción más común y cómoda es tomar un ferry desde Setúbal. Hay dos tipos de servicio: el catamarán para pasajeros, que tarda unos 15 minutos, y el ferry que permite llevar coche, con una duración de 30 minutos. Generalmente operan desde las 7:30 de la mañana hasta la medianoche, aunque los horarios varían según la temporada, por lo que te recomiendo consultar la página oficial de Atlantic Ferries para los horarios más actualizados: atlanticferries.pt.
La entrada a la Península de Troia como tal es gratuita, ya que es una zona abierta con playas públicas y resorts. El costo que tendrás que considerar es el del ferry desde Setúbal. Los precios varían si vas solo como pasajero o si llevas un vehículo. Puedes consultar las tarifas exactas y actualizar en la web de Atlantic Ferries para planificar tu presupuesto: atlanticferries.pt.
Para disfrutar de las playas, dar un paseo por la marina, explorar las ruinas romanas de Troia y quizás almorzar, te recomiendo dedicar al menos medio día, unas 4-5 horas. Si quieres relajarte en alguna de sus hermosas playas o realizar actividades acuáticas, podrías fácilmente quedarte un día completo o incluso un fin de semana.
La Península de Troia es famosa por sus antiguas ruinas romanas, conocidas como 'Cetóbriga', que datan del siglo I d.C. y fueron un importante centro de producción de salazones de pescado. Además de su valor histórico, es un enclave natural impresionante, un paraíso de dunas, arenales y pinares, y alberga uno de los campos de golf más prestigiosos de Europa. Es un lugar donde historia, naturaleza y lujo se fusionan.
La mejor época para visitar la Península de Troia es entre la primavera (abril-mayo) y principios de otoño (septiembre-octubre), cuando el clima es cálido y soleado pero las multitudes son menores que en pleno verano. Para evitar las aglomeraciones en las playas y conseguir mejor luz para fotografías, te recomiendo ir temprano por la mañana o al final de la tarde. Los atardeceres en Troia son espectaculares.
En general, las zonas urbanizadas como la marina y los resorts turísticos de Troia están diseñadas con cierta accesibilidad. Sin embargo, las playas y las Ruinas Romanas de Troia pueden presentar ciertas dificultades debido a la arena o los terrenos irregulares. Si viajas con alguna necesidad especial, te sugiero contactar directamente con los proveedores de servicios (como el ferry) y los alojamientos para confirmar sus instalaciones de accesibilidad.
Al otro lado del estuario puedes visitar Setúbal, una ciudad con un encanto portugués auténtico, famosa por su mercado de pescado y el Parque Natural da Arrábida, con paisajes montañosos y playas escondidas. También puedes hacer excursiones de avistamiento de delfines desde Setúbal, que suelen salir hacia el estuario del Sado y las costas de Troia. ¡No te lo puedes perder!
¡Claro! Te aconsejo llevar protector solar, sombrero y gafas de sol, ya que el sol puede ser intenso, especialmente en verano. Si planeas visitar las Ruinas Romanas, lleva calzado cómodo. Para las playas, no olvides tu bañador y toalla. Si vas en coche, hay amplias zonas de aparcamiento. Considera reservar el ferry con antelación en temporada alta si llevas vehículo.
Una joya arquitectónica en Lisboa que ofrece vistas panorámicas y un profundo legado histórico-religioso.